Esta tarde la ternura, el amor y la felicidad han llamado a mi puerta.
Abrir el alma a los recuerdos, a las sonrisas pasadas, a la inocencia, a la generosidad sin límites.
Abrir las puertas a la vida para que entre a raudales.
Abrir el corazón al abrazo infinito, al primer libro juntos, a la primera feria, al primer día de playa con vosotros, al primer día de colegio, a las primeras notas, a vuestro primer día de teatro.
Alguna vez estuve cansado pero siempre, siempre ilusionado.
Esta tarde he vuelto a ver vuestras fotos y la vida sigue entrando por mi puerta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario